DESNUDA, SINTONIZADA Y LOCA... UNA ENTREVISTA A DIEGA VALDÉS
- Brandy Moyano

- 14 ago 2024
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 11 feb
Escribe: Brandy Moyano
Ella nació en General Alvear, se fue a Buenos Aires, cambió su nombre. “A star is born”. Muy a lo Marilyn Monroe. Ella es Diega Valdés, diseñadora gráfica, ilustradora, bailarina, modelo, actriz, DJ, performer, parte de la escena Ballroom de Mendoza como Lynda Dukker, de la casa Dukker.
Nos hace un recorrido por su vida, el arte, y su forma de ver al mundo.
Preguntas para romper el hielo:
— ¿Dulce o salado?
— Agridulce.
— ¿Verano o invierno?
— Primavera.
— ¿Color favorito?
— Negro.
— ¿Última canción que escuchaste?
— “Corazón gitano” de Pimpinela.
— ¿Si te tuvieras que describir hoy en tres palabras, cuáles serían?
— Desnuda, sintonizada, loca.
— ¿Cómo es ser Diega Valdez en un día?
— No es tan tan complicado, es bastante simple porque soy una señora. Me gusta tomarme el día tranquila. No estoy tan llena de actividades. Depende del momento también, ojo. Obviamente practicando mucho yoga y meditación. Siempre preocupada por lo que voy a comer, siempre sin tacc. Pero mi mente siempre está pensando proyectos. Mi cuerpo tranquilo, pero mi mente está en un estudio de televisión, en un desfile. Siempre pensando en arte y en situaciones creativas. Mi proyección del día a día es una performance, pero sana. Juego y visualizo momentos como una forma de operar el día a día. Un mecanismo de sobrevivir.
— ¿Siempre fuiste una persona que vive por la creatividad?
— Siempre, desde que yo recuerdo siempre estuve atravesada por momentos que hicieron que mi mente se refugiara en la creatividad y la espiritualidad. Intentando siempre llevar mi mundo interior tranquilo porque soy una turbulencia constante. Entonces todo el tiempo necesito estar creando.
— ¿Ha sido tu motor de vida la creatividad, como forma de pensar?
— Si totalmente, además me he dado cuenta, gracias a los privilegios, que soy bastante habilidosa dibujando, bailando, vogueando, habilidosa con el cuerpo básicamente. Y hoy estoy en un punto de mi vida que todo eso lo utilizo como un outlet de todo lo que sucede en mi cabeza.
— Imaginemos a Diega de 10 años, ¿dónde encontrabas arte?
— En el juego. Siempre encontraba la forma, por supuesto a escondidas. Recuerdo mucho jugar a que tenía un programa de radio. Hacia una perfo básicamente, me ponía hablar como locutora (cosa que sigo haciendo) e inventaba personajes que venían a la radio. Siempre con mi hermana, por suerte. Y jugábamos a tener un programa de televisión, o a la maestra. Por supuesto yo quería ser siempre la conductora principal, la maestra, y muchas veces terminaba jugando sola porque no quería dejar jugar a nadie.
— Esa niña que jugaba a tener esos lugares de poder, ¿la seguís viendo en la mujer que sos?
— Si, sigue existiendo en mí. Súper potenciada. Gracias a todas las que vinieron antes que yo, y que nos abrieron el camino. Pero si me encuentro siendo una Diega que tiene un poder, pero siempre me gustaría más. Todo eso que estuvo guardado durante mucho tiempo por el contexto, hoy sale y quiere salir con todo. Estoy recuperando a esa Diega que quiere jugar. Y la mezclo con la Diega adulta que soy ahora. Y salen cosas maravillosas, somos atemporales nosotras. Por eso siempre digo que soy una psiquiátrica del tiempo.
— Y hoy, ¿qué es lo que te inspira a encontrarte con el arte?
— Las emociones, siempre que quiero materializar algo es porque vino de una emoción. Por eso hago tantas cosas, cada una de ellas me sirve para canalizar distintas emociones o sentires.
— Y en todas estas aristas artísticas ¿sentís que tu identidad está en primera fila?
— Sisi. La identidad vista desde muchas formas, no solo del género. El género es una de las partes que conforman nuestra identidad. Obviamente la sociedad le ha puesto mucho énfasis a lo que tenemos entre las piernas. Pero mi arte, mi expresión, mi identidad, mis formas de comunicarme, es una concepción de muchas partes. Pero obviamente cuando pude cuestionarme mi identidad de género, me di cuenta que había magia, había un abanico de bendiciones esperándome.
— ¿Cómo sentís al arte? ¿Como una forma de hacer política?
— Si por supuesto. Siempre encuentro un mensaje político en todo lo que hago. Hacer arte con un poco de política. Estamos en un momento y hemos vivido varias veces esto, donde el arte está siendo tan vulnerado y atrofiado por nuestros líderes, porque es un gran portavoz de todo lo que sucede. Pero al mismo tiempo prende una llama en todxs lxs que se consideran artistas, entre más nos cortan eso, mas hay que hacerlo. Esto no lo digo yo, lo dice la historia.
— ¿Cómo empezaste tu camino artístico?
— Primero siendo bailarina, pero bueno como estaba tan conectado a la feminidad no pude continuar. Y luego salto la ilustración como una forma de expresión, y empecé dibujando estampitas de la iglesia a la que iba.
— ¿Y cómo son tus procesos creativos a la hora de ilustrar?
— Depende mucho para qué lo hago. Si es para un trabajo, ya está premeditado y se tiene un diálogo con otra persona. Pero si es una ilustración que hago para mi salud básicamente, agarro una hoja y plasmo todo. Ahora estoy dibujando muchos paisajes como de naturaleza alienígena y pienso “¿será ahí donde quiero estar realmente?”
— ¿Y cuáles son las herramientas que más te gusta utilizar a la hora de ilustrar?
— Uso mucho lo digital. Amo el arte digital. Edición de fotos, collages, deformar mi cuerpo. Y obviamente la hoja y el papel. Amo las fibras y microfibras, y la pintura de tiza. Y por supuesto el acrílico en tela. Ahora estoy sintiendo mucho la necesidad de usar mis dibujos en ropa. Amo pintar ropa. Me siento una chamana llena de mis simbolismos. Como mi forma de escudo y a la vez de presentación. La perfo como forma de vida.
— ¿Quiénes son tus inspiraciones?
— Creo que yo misma, siempre tengo un circo interno que me inspira muchísimo. Y también mucho por las personas que me rodean, mis amigxs, mi hermana, mi madre, que son personas que tienen mucho material que me inspiran. Básicamente me inspiran las brujas.
— Para cerrar me gustaría que intencionaras tres cosas a futuro:
— Salud para mis padres. Una vida muy tranquila. Solventar todas mis expresiones artísticas.






















Comentarios